Ayer me encontré con un reportaje sobre Borges en uno de esos canales que tanto animan a la siesta y que me fascinan. En un momento, el presentador analizó la teoría de Borges sobre las vidas en un instante y los universos paralelos.
Te hubiese llamado, pero pensé que en el Everest no habría cobertura. Mientras tanto me detuve en esa idea borgiana compartida e increíblemente placentera.